comienzo del robo de niños en España

saparecido: Ya no existían y ni COMIENZOS DEL ROBO DE BEBES EN ESPAÑA

Madrid a 7 de Noviembre de 2012


FERNANDO MAGÁN*
VIERNES 25 DE FEBRERO DE 2011.  
DIAGONAL WEB
En el auto del Juez Baltasar Garzón 18 de Noviembre de 2008 establecida los hechos que cerca de 30.000 niños desaparecieron en las cárceles Franquistas, a presas republicanas, hoy entonces está desaparecidos y su paradero legal desconocido por lo que se interpreta como desaparición forzada.
El Fiscal General del Estado Cándido Conde-Pumpido Tourón admitía que existen niños robados y deriva las denuncias a los fiscales territoriales por que piensa que no se trata de un red de trata humana a nivel nacional. Sin embargo el auto del juez dice que debe centralizarse la investigación. En diciembre entró en vigor la Convención Internacional de Protección de personas desaparecidas, hecho que abre una nueva esperanza.

Testimonio Victoria

“Me llamo Victoria Illan Fresno nací supuestamente en Córdoba el 6 de septiembre del1939  en el departamento de maternidad de Córdoba fui bautizada el 8 del mismo mes .Salí prohijada por  D.Ricardo Rodrigez Rodrigez y D. Flora Alcaide Mármol escrituras otorgadas antes el  Notario de esta Capital D. Enrique Mdriua y Echevarria el 29 de  Marzo del 1941 firmado por el director Antonio Vázquez de la Torre   yo estoy en Francia y me es difícil buscar desde aquí en varias ocasiones me he presentado para pedir que  me facilitaran mis origines a lo cual siempre  me ha sido negado en el ano 2001 y 2002 volví a ir a Córdoba y tuve  que ir a la diputación y allí me dijeron que yo no estaba escrita en el  libro del registro de la maternidad de Córdoba y que yo no había nacido  allí.  Le pido por favor que me ayude a buscar mis origines  y una posible familia que pudiese tener saber quien  es mi madre biológica en fin saber quien
soy y  si Illan Fresno son mis padres.
Maria Victoria de pequeña en las fotos
·                            alcaide.marmol@facebook.com
















 LOS HIJOS DE LAS REPUBLICANAS

Los niños de las madres republicanas que estaban en las cárceles y los que fueron llevados al extranjero, el  único  partido político llamado la FALANGE ESPAÑOLA promulgó una iniciativa de protección y repatriación, con la única intención de secuestrar a los niños, en aquel entonces era inaceptable internacionalmente.

Según el médico Antonio Vallejo Nájera, copiando del más puro y duro del racismo nazi, que los padres “marxistas”, padecían una enfermedad congénita a erradicar, pero los hijos si son recuperables  para la nueva sociedad. Esto sucedió en España y bien entrado en 1948.

Esta estructura quedará configurada primero por la creación de Protección de Menores, donde coincidieron Falange y el Auxilio Social, los sistemas tradicionales de beneficencia en las provincias, las instituciones eclesiásticas, más otros estamentos dependientes de Justicia y los tribunales, que comenzaron a funcionar en la década de los cincuenta.

MARÍA JOSÉ ESTESO POVES / MADRID
MIÉRCOLES 6 DE MAYO DE 2009.  NÚMERO 101

“Lo llevaron a bautizar y no me lo devolvieron. Yo reclamaba el niño, y que si estaba malo, que si no estaba. No lo volví a ver”. Éste es el testimonio de Emilia Girón, que dio a luz en el hospital de la cárcel de Salamanca en 1941. Su delito, ser hermana de un guerrillero. Este caso y otros están recogidos en el auto de Garzón tras la denuncia presentada en la Audiencia Nacional por la Asociación para la Recuperación de la Memoria Histórica (ARMH). En el auto se dice que los niños perdidos son víctimas del Franquismo y que había un plan de desapariciones para eliminar oponentes. La Fiscalía declaró a Garzón no competente.

Después de la guerra la represión fue brutal, miles de personas fueron encarcelados, incluso de habilitaron conventos donde fueron muchas mujeres.

La cárcel de Ventas, concebida como un edificio moderno por Victoria Kent, se convirtió en un lugar infame. Tomasa Cuevas lo describe como un gigantesco almacén de mujeres. Antonia García dice: “Sólo recuerdo la locura de mi primer día en la sala de prisión: un sitio para 500 personas albergaba a 11.000. Las mujeres se tiraban al suelo a la vez, no había más sitio”.
Las presas vivían hacinadas con sus hijos y, pronto, la masificación supuso un problema, no humanitario, sino económico y administrativo. Mirta Núñez Balart, historiadora, calcula que en 1939 había 280.000 presos. Hoy con el doble de población son unos 60.000.

Las embarazadas con pena de muerte eran fusiladas nada más dar a luz, como relata Carlos Fonseca en Trece rosas rojas. Trinidad Gallego, matrona, fue encarcelada y ayudó a parir a sus compañeras de prisión. A sus 95 años recuerda para DIAGONAL que “allí los niños los disfrutaba la Topete [la directora María Topete]. Las madres estaban separadas de sus hijos, si devolvían, ellas no podían cuidarlos. Sarna, piojos, sin apenas comida ni agua. Morían muchos. Con tres años se los llevaban, si tenían familia, pero entonces todos estaban en la cárcel e iban a parar a los hospicios o no se sabe”.


En los años cuarenta las madres lactantes salían a los patios, sus hijos vivían separados de sus madres, ninguna madre podía cuidar de sus hijos. Ellas  trabajaban en talleres más de diez horas diarias. En Santurain (Pais Vasco), las monjas mandaron salir a las siquiera habían sido inscritos en los libros de registros.

Comentarios

Entradas populares de este blog

los casos de la casa de la madre c/goya 120

Los pisos nido de Mercedes de Grass LOS “PISOS-NIDO” DE DOÑA MERCEDES Una mujer montó en Bilbao una extensa red de casas para esconder a embarazadas de familias burguesas - Los bebés eran dados en adopción. NATALIA JUNQUERA / JESÚS DUVA 10 MAR 2011 Durante décadas miles de bebés en España fueron sustraídos o separados irregularmente de sus padres. Sigue la serie de EL PAÍS sobre este tráfico de niños y ofrece el relato de las víctimas y de quienes participaron en las tramas. Un nombre de mujer se repite en los sobrecogedores relatos de muchas de las madres que están denunciando el robo de sus hijos: el de Mercedes Herrán de Gras, que levantó una extensa red de pisos-nidopara embarazadas en Bilbao. Su finalidad era entregar a niños en adopción a través de una asociación fundada ex profeso por ella misma llamada María Madre. Doña Mercedes, como siguen refiriéndose a ella aquellas mujeres, llegó a tener en alquiler ocho viviendas en cada una de las cuales había una media de entre 10 y 22 chicas en periodo de gestación. "Todas le teníamos miedo. Era una mujer muy soberbia, muy rica. Siempre iba muy enjoyada. Tenía varios abrigos de piel. Casi no hablaba con nosotras. Solo venía, nos tocaba el vientre y calculaba el tiempo que nos faltaba para dar a luz", recuerda Dolores Chumillas, una de las chicas que fue a parar a uno de aquellos pisos. En su caso, fue captada por Fernando Ayala, un cura que remitía a los pisos de doña Mercedes a las jóvenes que conocía en la parroquia de San Nicolás de Bari. Los padres pagaban 25.000 pesetas al mes por la estancia de las jóvenes Las embarazadas pobres costeaban su hospedaje haciendo la limpieza A muchas se les forzaba a dar al bebé en adopción para eludir el escándalo La cabecilla de la red intercambiaba niños con una monja de Tenerife Al llegar allí, Dolores se sintió fuera de lugar. "En el piso, que estaba en la calle de la Alameda de Urquijo, había 19 chicas más embarazadas. Todas eran de familias bien. Se vestían de manera diferente, hablaban de una forma distinta, tenían las manos muy cuidadas, joyas... Sus padres iban a verlas con frecuencia", recuerda Dolores, a la que Mercedes puso a trabajar "como fregona" del resto de mujeres que había en la casa para costear su estancia. "Eran hijas de jueces, médicos, abogados, aristócratas, políticos, militares, empresarios...", asegura otra de las inquilinas de aquella casa, que prefiere ocultar su nombre y acusa a Herrán de Gras de robarle a su hijo en 1974. "El 90% eran adolescentes", añade. "Eran nuestros padres los que nos metían allí, pero algunas aceptaban que las internaran en aquel piso como una forma de ocultar el embarazo y luego deshacerse del niño. Otras, como yo, que tenía 17 años, estábamos allí forzadas por nuestros padres y no queríamos dar a nuestros hijos", recuerda. "Mi padre estuvo reprochándome durante años el dinero que le había costado mi estancia allí. Cada mes, según me dijo, tenía que pagarle a doña Mercedes 25.000 pesetas. Solía decirme que con ese dinero podía haberse comprado un piso". La red de viviendas de Herrán de Gras estaba pensada para las hijas deshonradas de familias burguesas. Pero doña Mercedes tenía tantos compromisos con matrimonios que querían adoptar que también acogió, aunque en condiciones bien distintas, a mujeres como Dolores Chumillas, sin dinero o apoyo familiar de ningún tipo. En estos casos, eran curas como el padre Ayala y monjas como sor Juana Alonso, superiora de la casa-cuna de Tenerife, quienes localizaban a las jóvenes embarazadas y las remitían a doña Mercedes. "Lo teníamos muy bien organizado. Yo he ido más de una vez a Bilbao. Ella tenía madres que iban a dar a luz y de vez en cuando nos llamaba y nos decía: 'Id preparando a los padres para que vayan a verlo'. Doña Mercedes también me llamaba cuando tenía algún compromiso y nos pedía un niño, y a veces “La señora de Gras dijo a mis padres que no volvieran en tren, que fueran en taxi a Madrid” Mercedes Herrán, más conocida como Mercedes de Gras, regentaba una red de pisos en Bilbao, en los que alojaba a mujeres embarazadas llegadas de todo el país. Esos bebés eran dados en adopción, en muchos casos sin el consentimiento de la madre, una trama de robo de bebés que De Gras lideraba. Ella misma se encargaba de buscar a los padres adoptivos. Paola Romero Rodríguez nació en uno de esos pisos de Bilbao. El hijo de Mercedes Herrán, Luis Gras Herrán, también adoptado. Éste asegura que no tiene documentación de las adopciones que llevó a cabo su madre y que todo lo entregó en la Diputación, en Bienestar Social. “No he conseguido averiguar nada sobre mi madre biológica. No tengo muchas esperanzas, además la Administración no colabora". Con Mercedes Herrán colaboraron varios médicos, curas y una pequeña red de monjas –de las Hermanas de la Caridad de Canarias, Madrid, Valencia y otros puntos del país–, que enviaban y pedían recién nacidos. El intercambio de bebés de una punta a otra del Estado español y la falsificación de documentos garantizaba que esos niños no iban a ser encontrados por sus padres biológicos. Paola Romero, Paula en los documentos de adopción, figura que fue adoptada “en forma plena” desde el primer día, según consta en la partida de nacimiento literal. En ese documento figuran los datos del funcionario y los del secretario. En la partida de nacimiento también aparece el lugar de nacimiento de Paola Romero, Gordoniz 12, dirección de la clínica privada San Francisco Javier de Bilbao que cerró el año pasado. Un ginecólogo de Bilbao, Jesús Fradua Alboniga certifica en la partida literal, el nacimiento de Paola. Algunos médicos que trabajaron en Godorniz 12 colaboraron en las adopciones que gestionaba Mercedes Herrán. También los sacerdotes Miguel Esparza y Fernando Ayala de Bilbao y abogados, que resolvían los expedientes de las adopciones de Bilbao, según la documentación en poder de los afectados.

la antigua inclusa de Madrid